«Mas allá de los «aspectos» difíciles presentes en una carta natal, tenemos la opción de relacionarnos con esos aspectos de manera efectiva. También tenemos la opción de sufrir si no somos hábiles. No se trata de cambiar las influencias astrológicas, sino de cambiar nuestra propia actitud. A menudo incluso los astrólogos pierden de vista este punto. Se cree que un aspecto difícil va a tener otros efectos a medida que la persona madura. No se trata de que hayan cambiado las posiciones planetarias, sino que la persona modifica su respuesta. La astrología no tiene un poder especial para crear las situaciones que se presentan en la vida de una persona. Los practicantes Budistas realizados, se preocupan muy poco por las influencias astrológicas. Ellos aplican la sabiduría de la «atención plena» a cualquier estímulo interior o exterior. Ni siquiera necesitan saber si se trata de una influencia astrológica. Su sabiduría y presencia plena resulta el mejor consejero. Sus decisiones y acciones benefician a todos. Este es el ejemplo de la actividad iluminada. Buda dijo: «Los seres con atención plena están libres de las influencias negativas». Lo que Buda quiso decir es que las personas que no tienen esta presencia o atención plena y sabiduría, responden de manera inconsciente (condicionada) a los estímulos de su entorno físico y emocional. Son gobernados por sus hábitos, el instinto y la confusión. Son predecibles porque están condicionados.»
Extracto del libro «Buddhist Astrology» de Lama Jhampa Shaneman.